Review: Roccat Raivo
Hoy analizaremos la nueva alfombrilla Roccat Raivo, un complemento ideal para los periféricos de una marca que cuida al más mínimo detalle a los jugadores más exigentes. Es por ello que la alfombrilla Raivo permite deslizar el ratón sobre su superficie con una alta velocidad. Para ello cuenta con 3 capas optimizadas para el mejor movimiento:
- Superficie micro-granulada para un deslizamiento ultra-rápido con un gran control.
- Capa interna dura y flexible para maximizar la comodidad.
- Base de goma antideslizamiento.
Cuenta además con una superficie resistente a manchas y de fácil limpieza, algo que siempre es adecuado para el uso intensivo al que está destinada.
Pasemos a analizarla de primera mano y ver cómo afectan sus principales virtudes, no sin antes agradecer a VsGamers por cedérnosla (pronto la tendrán disponible).
Embalaje
Encontramos la alfombrilla Roccat Raivo en un blíster de plástico transparente parcialmente cubierto por un cartón, que nos informa de sus prestaciones. Además, este último incluye muestra del material empleado para la superficie y base del ratón, pudiendo palparlo antes de decidirnos a abrirla.
En el lado posterior, encontramos sus características en múltiples idiomas, español incluido, y una lista de algunos de los ratones empleados para testear su correcto funcionamiento (no solo modelos Roccat).
Roccat Raivo
Abrimos el blíster y nos encontramos ante una alfombrilla de tamaño medio, aunque en comparación con las habituales puede resultar grande. Su diseño es sobrio, con una superficie rugosa en color negro mate solo alterada por el logotipo de la marca, el nombre del modelo y un pequeño apunte sobre su “ergonomía y precisión”.
De cerca, podemos apreciar con detalle la superficie micro-granulada, diseñada con precisión laser para que los surcos sean extremadamente pequeños. Es por ello que la declaran compatible con sensores de hasta 16.800 DPI, poco vistos en el mercado. El resultado es una superficie ultra-deslizable que permite un control total del movimiento del ratón, ya sea este láser u óptico.
La base está fabricada en goma antideslizante con pequeños orbes de gran tracción. Gracias a estos, la alfombrilla no quedara pegada a la superficie de la mesa, pero si mantendrá su posición inalterada con el movimiento de la mano sobre ella.
Con una altura de solo 2 mm, la alfombrilla Roccat Raivo integra una capa intermedia flexible que aporta mayor solidez al conjunto, de forma que no se deforme con el tiempo y ofrezca una gran estabilidad.
Un detalle muy importante es el espacio para la muñeca en el margen inferior de la alfombrilla, el cual ayuda a que esta no se desplace a causa del movimiento de la muñeca.
Pruebas
Hemos probado la alfombrilla Roccat Raivo durante horas de juegos y uso ofimático sin el más mínimo desplazamiento sobre la mesa. Su rigidez puede resultar extraña para los usuarios acostumbrados a una alfombrilla gomosa, pero al acostumbrarse verá que aporta un control más preciso del movimiento del ratón.
El deslizado del ratón sobre su superficie es suave y muy controlable, pero no por ello vamos a obtener una mejora en juegos fácilmente palpable; hablamos de una mejora mínima que solo podremos notar si el ratón elegido acompaña y para nada será palpable con ratones de baja resolución o poca calidad.
Conclusión
La alfombrilla Roccat Raivo se presenta como un modelo de medio formato que cumple sobradamente las expectativas de los jugadores más exigentes gracias a su superficie muy deslizante que permite un gran control del ratón. La única pega es su precio, que de forma oficial es de 29.99 euros, aunque siempre suele ser algo inferior una vez en tiendas. Si no eres un usuario muy exigente, su coste no tendrá sentido para ti, pero si eres de los que buscan el máximo rendimiento en todos los periféricos, la Roccat Raivo es una gran elección.
Desde del El Chapuzas Informático le otorgamos el Galardón de Oro a la alfombrilla Roccat Raivo.
