Review: Asus ROG Orion Pro

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Hoy presentamos el análisis de los auriculares Asus ROG Orion Pro, que como su nombre ya nos indica pertenecen a la gama de productos gaming Republic of Gamers de Asus. El Orion Pro incluye el ROG Spitfire, un controlador de audio digital que, sin necesidad de drivers, permite configurar 3 modos de sonido: 7.1 virtual Surround, amplificador de auriculares o FPS. Sus altavoces de 50 mm fabricados en neodimio magnético aseguran un gran sonido, mientras que sus almohadillas con un diámetro de 100 mm quedaran apoyadas alrededor del oído en formato circumaural.

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Veamos las especificaciones del Asus ROG Orion Pro en la siguiente tabla:

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Antes de comenzar la review, queremos dar las gracias a Asus por cedernos los auriculares Asus ROG Orion Pro para su análisis.

Embalaje

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Los auriculares Asus ROG Orion Pro vienen en una caja de cartón con una ventana frontal/lateral que permite ver parte de su diseño sin abrir el embalaje.

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En parte del frontal y la zona trasera encontramos información de sus principales características y las especificaciones ya vistas.

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Abrimos la caja y encontramos los auriculares en un plástico protector. Se adjunta una guía de usuario y una goma recoge cable, muy interesante debido a la gran longitud total del cable.

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Asus ROG Orion Pro

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Tras retirar por completo el embalaje, nos encontramos ante unos auriculares de peso medio, aunque este se debe al sistema metálico para configurarlos en altura. Su aspecto es muy robusto con un colorido marca de la familia ROG en combinación de negro con detalles rojos y grises.

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En la vista lateral, apreciamos un auricular redondo con un amplio tamaño que ofrece una cavidad aural de 100 mm, bastante amplia en comparación con otros modelos. El altavoz interno fabricado en neodimio ofrece en sus 50 mm una sensibilidad de 100 dB y una frecuencia de entre 20 Hz y 20.000 Hz (bajo una impedancia de 32 Ω).

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El sistema de regulación de altura de grueso aluminio aporta robustez al conjunto a la vez que asegura una mayor duración frente a otros sistemas de plástico o de fino metal.

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En el lado opuesto, vemos un diseño simétrico a excepción del micrófono retráctil que sorprende por la facilidad con la que podemos tanto sacarlo como volver a introducirlo. Queda muy bien escondido, por lo que pueden usarse los auriculares con el oculto como si no lo tuviese. Ofrece una longitud de 12 cm y un cable poco deformable por su cubierta de goma. Cuenta además con un sistema de cancelación del ruido por encima de 30 dB que permite un reconocimiento vocal de mayor nitidez.

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Además de una diadema flexible, el anclaje a los altavoces permite cierto margen de giro para una mejor ergonomía al adaptarse al ángulo propio de la cabeza.

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La almohadilla interior con diseño circumaural ofrece una cavidad interna con un diámetro de 100 mm, muy amplia en comparación con lo habitual. Con un acabado en piel-símil, queda apoyada suavemente alrededor de la oreja sin ejercer mucha presión. Sobre la propia oreja quedara parcialmente en contacto la tela roja que no dispone de un interior de espuma, pero tampoco se hace necesario en nuestro caso al no entrar en contacto.

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La diadema también cuenta en su interior con una almohadilla con similar acabado que en los auriculares.

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Pasamos al cableado, el cual es especialmente destacable en estos auriculares. De ellos parte un cable de 2.55 metros enmallado y bastante sólido en el que encontramos un control de audio que permite activar/desactivar el micrófono y controlar el volumen de los auriculares mediante un potenciómetro. Tanto el interruptor como el potenciómetro se muestran robustos y parecen duraderos, aunque siempre es un lugar donde tienden a fallar todos los modelos en general.

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Con un cableado independiente, el ROG Spitfire ofrece una controladora de audio que, sin necesidad de drivers, permite configurar 3 modos de sonido en función de nuestras necesidades. Podemos combinar los 3 ya que su activación es independiente y permite la simultaneidad.

El modo AMP ofrece simplemente una amplificación del sonido, aunque en este caso especialmente diseñada para estos auriculares. Puede usarse con cualquier auricular, por lo que ya tenemos un gran punto a su favor.

El modo Surround genera un efecto de sonido envolvente 7.1.

El modo FPS activa algoritmos pensados para mejorar el sonido de armas, voces y efectos con mayor nitidez y precisión direccional.

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El cable que parte de los auriculares esta rematado tras 2.55 metros en dos conectores jack de 3.5 mm dorados. Cuenta además con un separador de goma en el que podemos “enchufar” el micrófono en caso de no usarlo.

El ROG Spitfire dispone de un cable de 105 cm rematado en un conector USB, e igualmente ofrece mallado para su protección.

Pruebas

Hemos probado los auriculares durante varias horas para ver la calidad de sonido que ofrecen tanto en juegos como en reproducción musical y la ergonomía que presentan. Sobre esto último basta con decir que son muy cómodos gracias a su posibilidad de configuración en altura y poca presión lateral, que en combinación con el diseño circumaural mantiene las orejas sin presión alguna.

Tanto en juegos como en música, ofrecen un gran volumen de sonido que se incrementa aún más usando el modo AMP. En el apartado puramente musical, que no es su principal faceta, ofrecen un sonido nítido con buenos niveles de agudos y medios y quizás graves ligeramente bajos, pero no demasiado.

Para juegos, centrándonos en shooters donde presenta su mayor virtud, ofrecen un sonido muy claro y se aprecian muy bien todos los detalles incluso “lejanos”. Los modos Surround y FPS toman especial importancia y ofrecen lo que anuncian con un efecto muy interesante que a la mayoría de usuarios agradará. Seguramente no mataras más enemigos, pero quizás escuches antes al que intenta acuchillarte por la espalda.

Un último detalle es la insonorización, prácticamente inexistente sin fuente de sonido pero muy alta una vez comenzamos a reproducir música o a jugar.

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Conclusión

Los auriculares Asus ROG Orion Pro ofrecen una muy buena calidad de sonido tanto en la reproducción de música como en sesiones de juegos, donde especialmente se hacen notar. Los modos de la controladora USB realzan en gran medida el sonido, mejorando las ya de por si buenas prestaciones del producto. La ergonomía es realmente muy buena, adaptándose fácilmente a cualquier cabeza y ejerciendo poca presión sobre esta.

Como nota adicional, citar que no son compatibles con consolas, por lo que solo podrán disfrutar de ellos los usuarios de PC.

Podemos encontrarlos a la venta desde 80 euros en multitud de tienda online. También podemos adquirir los modelos Orion (a secas) que prescinde del ROG Spitfire y cuesta unos 65 euros, pero perdemos algo que da un toque extra de calidad a un precio equilibrado. El precio quizás es algo elevado para unos auriculares, pero las prestaciones que ofrece lo compensan para los usuarios más exigentes, sobre todo los que pasan horas y horas jugando en el PC.

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Desde del El Chapuzas Informático le otorgamos el Galardón de Oro a los auriculares  Asus ROG Orion Pro ofrecer una muy buena calidad de sonido y excelente ergonomía.

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