Review: Krom Key

Krom Key

Una vez desembalamos por completo el Krom Key, nos encontramos ante un controlador inspirado en el de Xbox One en cuanto a la posición de los joysticks y botones, aunque con algunas diferencias. Con unas dimensiones de 150 x 103 x 69 mm y un peso de 230 gramos, ofrece la misma ergonomía que el anteriormente citado, pero resulta algo más ligero. Quizás por ello parezca algo menos robusto, pero el plástico que lo forma es de buena calidad y cuenta con buenos acabados.

Desde la vista frontal, ofrece la misma combinación de 2 joysticks mecánicos, una cruceta y los 4 botones ABXY, diferenciándose en los 4 botones restantes. Etiquetados como Select, Start, Home y Turbo, realmente podremos configurar los dos primeros a nuestro antojo, mientras que Home tiene una función obvia y Turbo es de lo más interesante. Este botón permite que los botones ABXY cliqueen de forma repetitiva manteniéndolos pulsados, en lugar de hacer un solo clic. Es por tanto muy útil para convertir, por ejemplo, un arma semiautomática en automática, entre otros usos.

En el lado posterior ofrece la misma pareja de botones y gatillos que en el de Xbox One, por lo que no da mucho a comentar en este sentido. Sin embargo, podemos ver como de el parte el cable de conexión, pues no es inalámbrico.